Descanso incomparable en camas king size
Dormir (bien) es el más grande placer de la vida. Descansar es lo único que te permite afrontar el día siguiente con más fuerzas. Por eso, es súper importante que la cama sea cómoda y que tenga espacio suficiente para moverte a tus anchas. Si alguna vez te has caído de la cama por que te mueves más que un pez fuera del agua, tu parejas te da muchas patadas o tus pequeños encuentran tu cama más cómoda de la suya, entonces necesitas una cama king size. Adquiere la tuya en Madera VIVA y duerme como en un hotel de cinco estrellas.
Para dormitorios grandes y medianos
Lo ideal para elegir una cama king size es tener una habitación con un tamaño generoso, con lo que te será más fácil incluir también otros muebles para completar tu recámara, como buro o cómoda de madera, sin sobrecargar la decoración. Si tu habitación es pequeña, no renuncies a la idea de comprar una cama king. Te damos unas ideas prácticas. Por ejemplo, puedes sustituir los buroes por baldas de pared para colocar el despertador o una lamparita de noche. Un espejo grande bien posicionado también ayudará mucho para crear una sensación de amplitud.
Otros trucos
Explora entre nuestro amplio catálogo de camas grandes y elige una que incluya soluciones de almacenaje, como unos cajones, una cama elevable o, incluso, un espacio para poner libros. Para que la habitación esté más despejada, renuncia a la cabecera o elige un modelo de madera que ocupe menos espacio. Los colores de la habitación también son clave: Elige una cama en tono claro para dar luminosidad y decora el espacio con complementos en color más llamativos. El gris es un color muy popular para combinar y dar amplitud al espacio.
La cereza del pastel
Una vez elijas tu nueva cama, sólo te quedará añadir el toque final. Descubre nuestra selección de ropa de cama de calidad hotelera y úsalas para agregar más confort a tu descanso. Como detalle final, coloca algunos cojines lisos o estampados sobre tu cama y tendrás un espacio que invita a relajarte. Pon algún detalle en la pared, como un cuadro, y asegúrate de iluminar bien la habitación con luz natural o artificial. Ahora si, prepárate para descansar como nunca.